Los productos derivados de CBD o cannabidiol son lo suficientemente novedosos en nuestras vidas como para que muchos necesiten aún ayuda a la hora de decidir cuánto desembolsar por ellos. Seamos sinceros: no son productos baratos. Sus beneficios lo valen: el CBD se estudia por su acción analgésica, antiinflamatoria y ansiolítica, entre otras. La evidencia sobre sus efectos cada vez es mayor. Igual sirve para mejorar el aspecto de la piel que para calmar un dolor de espalda. Además, el CBD o cannabidiol es una sustancia 100% natural, cualidad que muchos valoran a la hora de integrarla en su rutina diaria. Ahora bien, una cosa es apreciar la calidad, y otra pagar de más porque sí. No está el horno para bollos. Y cada céntimo cuenta.

“Para saber lo que estás pagando por tus productos de CBD, existe una regla muy sencilla: divide el precio del producto entre los miligramos de CBD de tu crema, aceite o flor”, expone Ana García, responsable de divulgación de ProfesorCBD: “Por ejemplo, nuestro aceite al 5% de CBD hakuna Oil, que tiene 500 mg de CBD y cuesta 29,95 €: el precio del mg e CBD sería de 0,059 €”. Con este cálculo, el usuario ya puede decidir qué marca le sale más económica y qué otra le está inflando el precio de los productos. Para ello, es necesario que toda la información (ingredientes, analítica…) esté expuesta en la ficha del producto que se va a adquirir. Desde Natural Total, recomendamos siempre apostar por los e-commerce trasparentes, que no ocultan ingredientes ni intentan trampear con ellos. Por ejemplo, no es lo mismo aceite de cáñamo que aceite de CBD: el segundo es mucho más valioso que el primero desde el punto de vista de sus beneficios, por lo que su precio, lógicamente, será superior.

Otros elementos que hay que tener en cuenta a la hora de comprar un producto de CBD sin sentirse estafado son los medios de producción (mejor ecológico y nacional, por resultar más sostenible y, a largo plazo, más barato para todos) o el tipo de servicio de la tienda online donde se adquiera. El reparto exprés, la atención telefónica o la usabilidad de la web son elementos que influirán en que merezca o no la pena rascarse un poco el bolsillo. Huye de los chollos fraudulentos que claman, por ejemplo, curas milagrosas. Confía en las marcas de CBD que se molestan en buscarte todos los estudios de cada beneficio que asocian a sus productos.

En cosmética, valora los ingredientes extra

Además del cannabidiol, las cremas o geles deportivos de CBD incluyen ingredientes que pueden mejoran la fórmula. Valora positivamente algunos como el coral rojo o el aloe vera. Una facial hidratante de CBD con ácido hialurónico será, lógicamente, más cara que otra que no contenga este otro ingrediente estrella de la cosmética. Pero también más eficaz. No es lo mismo pagar más que pagar de más.

Otros detalles que importan: flor de cultivo indoor y aceite full spectrum

En ambas categorías, la de flor de CBD y la de aceite de CBD, estos atributos justifican un precio algo más elevado. Las flores cultivadas en interior, por ejemplo, son más costosas para el productor, pues requieren de mayor técnica y, por tanto, se controlan mejor los resultados, Como explican, mediante una acertada metáfora, en la web especializada Cañamo.net, la flor indoor vendría a ser como el que paga la matrícula del gimnasio cool y tiene hasta acceso a piscina, mientras que la outdoor se curte saliendo a trotar por el monte y sudando en la maquinaria callejera. Cada una tiene su público, pero la primera, sin duda, es más costosa. Tiendas como ProfesorCBD tienen, en su catálogo,  flores indoor como Amnesia Haze o Candy Kush, entre 1 y 2 euros más cara que el resto, por gramos de flor de CBD. En cuanto a los aceites, una extracción que respete todos los componentes de la planta, como los terpenos, resulta un poco más costosa (también da lugar a un producto más rico). Traducido al consumidor: un aceite isolado (solo CBD) no puede ser más caro que un full spectrum (CBD + otros valiosos ingredientes naturales). O no debería.

Finalmente, y aunque suene a Perogrullo, no estarás pagando de más si te funciona. Sin embargo, si tu producto de CBD no desata el efecto que buscabas, estarás tirando el dinero. Así que nuestro último consejo es este: busca tiendas online que cumplan todos los requisitos de calidad mencionados, pero que también lancen ofertas y promociones frecuentes. Solo así podrás dar con el formato que a ti te vale y la cantidad de CBD que te funciona… sin arruinarte en el camino.